miércoles, 12 de septiembre de 2012

La aduana de crecer

Mis 18 fueron perfectos, con una gran celebración entre colegas y grandes amigos que quizá nunca volvere a ver debido a que nuestras vidas cambiarán, cada uno con su rumbo, se acabó eso de verles a diario en el colegio. Vendrán nuevas amistades y dejaremos en fotos las antiguas...
Mi cumpleaños, rodeado de amigos y de mi novia, la novia que creía era perfecta para mi... pero bueno la vida te pone a prueba, y prueba tras prueba, vamos superandola.
Dejarlo todo, irme al fin del mundo con ella, besarla y pensar que el tiempo es un cabrón porque pasa muy deprisa, sentir que eramos uno... que lejos quedó aquello, que bonito parecía ser todo y joder, ¿a dónde hemos llegado? A ningún lado, es algo fácil de contestar... nos hemos quedado en las puertas del cielo, donde tantas veces volé contigo...
Es parte de la vida darte cuenta de las cosas, y cumpliendo años te das cuenta que no vives en un cuento, que los problemas llegan de todos lados, que el dinero ocupa todas las portadas y tú detrás, jodido por él, que en esta vida no puedes creerte más que nadie, ni creer que vivirás como el protagonista de la serie que ves cada jueves... que no, que la vida es para los fuertes, que los palos hay que soportarlos. También te das cuenta de las cosas que son posibles y de las que no, y volar, amigo mio, no es posible. Yo creí volar, pero todo era fruto de la droga a la que era adicto, ella.